¿Por qué?, porque hacemos que el cambio ocurra.
Ese es el trabajo del mercaderista. No es hacer anuncios y ponerlos a rodar, no es vender lo que caiga como sea, no es inventarse una copla ni el himno de la empresa, no es tomar fotos y hacer el un sitio web.
El buen mercadeo genera cambios, discusión y evolución. Si no eres feliz con los cambios mejor haz otra cosa.
Resulta que el mercadeo de atracción basado en datos es mucho más efectivo que cualquier otro. Mostrar sus productos o servicios de una manera humana, segmentada y enfocada en impactar las emociones de las personas es una herramienta muy poderosa para hacer que el cambio ocurra.
El otro tipo de mercadeo genera resultados momentáneos, poco sostenibles y mala reputación.
Lo que necesitamos es buen mercadeo. Mercadeo que entienda a las personas, que mejore la comunicación, que haga las cosas mejores, que se dirija a públicos específicos y que atraiga las 24 horas del día.
Próximamente lanzaremos nuestra comunidad KRECER. Una comunidad enfocada en apoyar a las empresas familiares en su proceso de transferencia generacional y adaptación al mundo digital.
