El trabajo no termina en negociar, se debe garantizar la viabilidad y la ejecución del proyecto, por medio de un acuerdo con los que realmente están al frente pero no se sientan en la mesa. Recuerda que los que se sientan en la mesa casi nunca están solos. Casi siempre hay alguien detrás: el socio, un amigo, la mamá, la esposa, el papá, la abuela, los hijos, la junta directiva, el jefe, el jefe del jefe, el hijo del dueño, entre otros.
Pero entonces ¿cómo podrías influenciar a los que no están sentados en la mesa?
¡Acá te dejamos algunas ideas!
1 - Pregunta por ellos y trata de traerlos a la mesa:
- ¿Cómo afecta esto a tu equipo?
- ¿Qué sabe tu equipo sobre este proyecto?
- ¿Necesitas que te apoyemos con tu equipo?
- ¿Cuáles son las mayores dificultades que perciben en esta área tus colegas?
- ¿Quién más tiene responsabilidad de este proyecto?
- ¿Cuáles son las motivaciones de tu equipo para ejecutar este proyecto?
- ¿Las demás personas de tu equipo están de acuerdo con esto?
- ¿Cómo podemos asegurar que todo el tiempo que le vamos dedicar a este proyecto llegue a las personas que firmaran el acuerdo?
2 - Ojo 👁️🗨️ con las emociones
Ten en cuenta que muchas negociaciones suelen estar influenciadas por cuestiones emocionales, de autoestima, status, ego y otras necesidades no transaccionales o monetarias. Por lo tanto, es importante escuchar, observar y acercarse para cazar mentirosos y seducir al resto.
3 - Analiza la información y actúa
Con la información recopilada puedes hacer una llamada, invitar por un café virtual y tener buenas conversaciones. Además en algunos casos puedes crear contenido de calidad para que los que están sentados en la mesa puedan compartirlo de manera fácil y rápida.
